Paul Gilbert: Guitarra, Voz
Tony Spinner: Guitarra, Voz
Craig Martini: Bajo, Voz
Jeff Bowders: Batería
Dice mi amigo Carrascus que no hay nada más coñazo que un guitarrista virtuoso. Bueno, no le falta razón. Aunque más pesado es Robert Fripp con sus Soundscapes. De todas formas en vivo y en directo no es lo mismo que en los discos y para cualquier guitarrista de medio pelo como yo, ver a alguien de cerca con esa técnica y esa velocidad hacer esos malabarismos en un mástil es una oportunidad que no se presenta todos los días. Y máxime cuando hablamos de uno de los grandes, grandes. Nada menos que Paul Gilbert.
Anoche tuvimos todo lo que podíamos esperar: virtuosismo a raudales, guitarra signature, marshalls, pedaleras para ciempiés, duelos, posturitas, caña, distorsión…una sala hasta la bandera llena de jevilones que puño con cuernos en alto movían sus melenas en señal de reverencia al dios de la guitarra. Más alto, más fuerte, más rápido, más tó.
Bueno, fuera de coñas, estuvo muy bien. Paul Gilbert desgranó un repertorio basado en su último trabajo Fuzz Universe y lo aliñó con un buen puñado de versiones y viejos temas de sus anteriores formaciones Mr. Big y Racer X. En la banda Tony Spinner, un viejo mercenario de Toto, en la segunda mejor guitarra, y una muy acertada sección rítmica con los desconocidos para mi Craig Martini y Jeff Bowders. De entre los temas del último trabajo me quedo con el título que da nombre al disco “Fuzz Universe”, dejando claro casi al principio del concierto de qué iba todo aquello por si algún despistado se había perdido. Después un momento álgido donde Gilbert se puede decir que tocó techo, y nosotros con él, en ese alarde de técnica que es “Technical Difficulties”, de su etapa en Racer X. Y es que el título lo dice todo, no?. Un momento más o menos meloso dentro de tanta tralla, fue la preciosa “Green-Tinted Sixties Mind”, ésta de la época Mr. Big. Respecto a las versiones, pues hubo de todo. A mi es que me encantan las versiones. Ver cómo alguien se atreve a rehacer o destrozar un clásico, siempre me ha gustado. En el caso que nos ocupa pues hombre…marcarse un “Rock Me Baby” de BB King en plan tapping pues como que no. Pero el “Roundabout” de Yes sonó cojonudo y se me pusieron los pelos de punta. Ésta sí que sí. Después se marcó antes del bis un “Light My Fire” de los Doors bastante simpático y donde se veía que Gilbert y los demás disfrutaban a tope. Sobre todo cuando llegaba aquello de “…try to set de night on FIREEE”. Por cierto que dijo que no iba a hacer la pantomima de meterse en los camerinos un par de minutos y volver a salir….que quería seguir tocando porque se lo estaba pasando bien (lo mismito, lo mismito que dijo Jorge Ilegal). También se marcó el "Little Wing" del Hendrix (da la sensación de que todo guitarrista que se precie quiere rendir tributo al maestro tocando esta canción) y acabó el concierto con “Go Down” de los AC/DC.
Y por último despedirnos de la Sala Q, que cierra sus puertas definitivamente el próximo 31 de diciembre. Desconozco el detalle de por qué del cierre. Supongo que no les salen las cuentas, y aunque en las dos últimas ocasiones que he estado allí el lleno ha sido total, la falta de apoyo y remar solos contracorriente en los tiempos que corren es imposible. Es una pena y una gran pérdida porque han mantenido a lo largo de los años un programa muy atractivo, sobre todo en lo metaloide, a precios populares. Suerte en próximos proyectos.